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#EntrevistaBIOSPAIN2023 | “En España hay la concepción errónea de que la financiación pública y privada tienen que ir por separado”

Hablamos sobre la innovación en el sector tecnológico con Natalia de la Figuera y Josep Lluís Falcó, socios fundadores de GÉNESIS Biomed, Silver Sponsor de BIOSPAIN 2023. 

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A lo largo de los últimos años hemos sido testigos de una paulatina transformación de los sectores sanitario y biotecnológico. Un recorrido que se ha acelerado con la crisis sanitaria provocada por la covid-19 y que se ha traducido en una fuerte convergencia entre estas áreas y el sector empresarial. 

La fotografía que observamos nos muestra una serie de imperiosas necesidades como hacer más sostenibles los sistemas sanitarios y aumentar la eficiencia en el descubrimiento y desarrollo de nuevos fármacos, en un contexto en continúa transformación gracias al potencial de la biotecnología. 

En este sentido, la necesidad de empresas de consultoría en I+D+i y transferencia tecnológica en el campo de la biomedicina se erige como el eje vertebral a la hora de ayudar en la creación y acompañamiento de start-up/spin-off. Desafío que conocen bien en GENESIS Biomed, consultora del sector biomédico especializada en la prestación de servicios de consultoría a empresas de nueva creación, spin-off, emprendedores y centros de investigación y Silver Sponsor de BIOSPAIN 2023. Hablamos con Natalia de la Figuera y Josep Lluís Falcó para conocer su experiencia en este campo y profundizar en algunas de las tendencias que centran el programa de BIOSPAIN 2023.

AseBio. Innovación y biotecnología conforman un férreo binomio que, en los últimos años, ha demostrado un gran potencial y capacidad de transformación. ¿Qué fotografía observamos del sector biotecnológico en España?

Natalia de la Figuera y Josep Lluís Falcó. España es un país bien posicionado en la I+D+i en el área de la biotecnología. En la investigación en este campo esto se ve reflejado por el importante número de publicaciones realizadas en prestigiosas revistas con alto impacto ocupando la posición novena a nivel mundial. Además, también existe un alto interés de los jóvenes por estudiar disciplinas relacionadas con este campo, como se demuestra en la nota alta de corte que se exige para estudiar disciplinas relacionadas. Por lo tanto, existe cantera en este país, lo cual ya es un buen inicio. Y si nos referimos a la biotecnología en el entorno de la Salud, tenemos además Hospitales que son pioneros en investigación potenciado por el hecho de que España es el tercer país donde se realizan más ensayos clínicos a nivel mundial

Si a la innovación procedente de ese talento le damos herramientas tanto públicas como privadas para realizar la transferencia hacia el tejido productivo de nuestro país, además de facilitar la llegada de soluciones a través de la biotecnología a problemas de salud, alimentación, medio ambiente que acucian a la humanidad conseguiremos también crear una economía del conocimiento que revertirá en aumento del PIB, creación de empleo, etc.

Una prueba de que vamos por el buen camino es que según el informe de AseBio en el año 2021 aumentó un 11,5% el número de empresas que componen el sector. Pero ir en el buen camino no exime de continuar trabajando para potenciar el sector.
 
AseBio. Una de vuestras principales funciones es ayudar a las empresas de nueva creación, spin-off, emprendedores y centros de investigación. ¿Cómo realizáis este trabajo?

Natalia de la Figuera y Josep Lluís Falcó. Lo principal es establecer una relación de confianza con los emprendedores, para poder asesorarlos convenientemente necesitamos conocer bien el proyecto, sus puntos fuertes y sus puntos débiles. Haber pasado antes por su lugar, como investigadores y emprendedores, nos ayuda mucho a empatizar con ellos. Con toda la experiencia acumulada de los últimos años, y convirtiéndonos en miembros del equipo emprendedor de facto, les ayudamos a establecer estrategias de negocio que permitan a la empresa de nueva creación aumentar la probabilidad de éxito de que su solución llegue al mercado.

AseBio. El foco de GENESIS Biomed se fija en proyectos en fase muy temprana del ámbito de la biomedicina para así alcanzar el valor necesario de su investigación y, posteriormente, atraer la primera ronda de inversión de fondos corporativos o capital riesgo. Desde vuestra experiencia, ¿qué escenario observamos en nuestro país en materia de emprendimiento en el sector de la biomedicina?

Natalia de la Figuera y Josep Lluís Falcó. Generalmente la génesis de muchos proyectos de innovación proviene de la investigación pública. Y es la financiación pública la que permite a través de ayudas comenzar la maduración de esos proyectos. Pero llega un momento que esa financiación pública, que en general es escasa por definición, pasa a ser totalmente insuficiente para seguir avanzando y es entonces cuando hay que dar entrada al capital privado, pero para hacerlo factible hay que constituirse como empresa.  Habitualmente en ese estadio el proyecto no está lo suficientemente maduro para que el Venture Capital lo considere atractivo. Es aquí donde los Business Angels, Family Offices, crowdfunding o vehículos de inversión early-stage, como alguno de los que gestiona GENESIS Biomed como actualmente lo hace con GENESIS Tech Transfer Boost, pasan a cubrir ese espacio o gap.

Desde GENESIS Biomed contribuimos a realizar esa búsqueda de financiación ya sea en early-stage o en posteriores rondas de inversión. En España existen las opciones de financiación privada no bancaria que hemos comentado, aunque menos que en otros países, y además las existentes están más focalizadas en otros sectores externos al sector salud y es necesario transmitir que la biotecnología es un valor interesante donde poder invertir.

Además, en España hay la concepción errónea de que la financiación pública y privada tienen que ir por separado. Nosotros siempre hemos dicho que la colaboración público-privada es fundamental para potenciar el emprendimiento. El trabajo en equipo, incluyendo la administración pública y privada, es lo que permitirá llegar a buen puerto nuestros proyectos. La administración pública es la que permite las inversiones en investigación que después darán lugar a la innovación, sin esa semilla sembrada a través de las Universidades, centros de investigación, Hospitales, etc no habría más adelante una planta. Pero también hay que ser consciente que la administración pública no tiene recursos infinitos y allí es donde entra la colaboración privada, que además tiene una versión más pragmática del mundo económico y empresarial

A veces personas del sector público consideran que no es justo que la investigación procedente de Universidades o centros públicos se vayan a la empresa, pero creo que no son conscientes de que eso precisamente es lo que facilita que las soluciones lleguen al mercado y no se queden en una publicación. De la economía del conocimiento nos beneficiamos todos porque eso crea riqueza y puestos de trabajo en el sector privado, aumentando el PIB y revirtiendo también en la parte pública a través de los impuestos. Al final son vasos comunicantes. 

AseBio. ¿Cómo se logra generar el máximo valor en los proyectos de I+D+i?

Natalia de la Figuera y Josep Lluís Falcó. De alguna manera el valor de un proyecto de I+D+i viene dado por el grado de madurez del proyecto. Y ese grado de madurez está relacionado con la mayor probabilidad de éxito y la reducción del riesgo. Por lo tanto, un proyecto tendrá más valor cuánto más maduro, menos riesgo y más probabilidad de éxito tenga. 

Aunque lógicamente después también haya una componente económica que vendrá dada por la previsión de las ventas que reportará la llegada de ese producto al mercado. Por eso es necesario generar un plan de negocio para poder evaluar todas estas componentes en el proyecto y así poder saber en qué situación está el proyecto y en qué áreas podemos incidir para aumentar su valor, que siempre será un intangible hasta que llegue al mercado. 

AseBio. También realizáis inversiones en proyectos en fases tempranas con la misión de valorizarlos y alcanzar hitos importantes que aproximen la innovación al mercado y establezcan escenarios de salida que posibiliten un retorno de la inversión atractivo. ¿Cómo trabajáis este objetivo?

Natalia de la Figuera y Josep Lluís Falcó. Desde GENESIS Biomed se han gestionado dos vehículos de inversión, GENESIS Ventures constituida en 2017 por un total de 2,5M€ y actualmente GENESIS Tech Transfer Boost constituido en 2022 con un capital comprometido de 1M € en los próximos 4 años. Vehículos como estos, como ya hemos comentado, pasan a cubrir ese espacio o gap que hay entre la financiación pública y el Venture Capital. Este tramo de financiación en las empresas de nueva creación, spin-off y start-ups, hasta ahora estaban infra representadas y desde GENESIS Biomed identificamos que era una necesidad.

La manera de trabajar en estos vehículos de inversión, como en cualquier sistema de financiación privada, es realizar un análisis del proyecto donde se estudian un gran número de aspectos como pueden ser el análisis de mercado, el estudio de la competencia, las pruebas de concepto, la propiedad intelectual, el roadmap regulatorio, el equipo, el plan de negocio o el plan financiero. A partir de ese estudio concluyes la viabilidad del proyecto, el riesgo e identificas si la inversión que realizarás puede contribuir a avanzar el proyecto en determinados aspectos que aumenten las probabilidades de éxito y que te permitirá alcanzar, por lo tanto, el retorno de la inversión en el futuro.

AseBio. ¿Qué espera GENESIS Biomed de BIOSPAIN 2023?

Natalia de la Figuera y Josep Lluís Falcó. Esperamos algo muy sencillo: seguir colaborando para que nuestro ecosistema biotech siga creciendo y madurando. La comunicación entre los diferentes stakeholders del sector de la biotecnología es imprescindible para que el sector crezca. La creación de las sinergias entre todos los stakeholders involucrados inversores, spin-off, start-ups, consultores, etc., además de fomentar la colaboración, nos permite identificar las necesidades y actuar como altavoz para proponer ideas. La creación de un sentimiento de pertenencia a un sector puntero que ya es uno de los motores de crecimiento contribuirá a su percepción desde el tejido social y productivo como algo positivo que cristalice en políticas que impulsen el sector.