Francisco Fernández-Avilés: “El desarrollo de las técnicas de imagen en cardiología ayuda de manera importante a la toma de decisiones y a la planificación de las intervenciones quirúrgicas o con catéter"

El Dr. Fernández Avilés es Catedrático de Medicina Cardiovascular de la Universidad Complutense (UCM), Director del Departamento de Cardiología del Hospital Universitario San Rafael de Madrid (Orden Hospitalaria de San Juan de Dios). Como director Científico del CIBERCV, ha coordinado la actividad los mejores grupos de investigación cardiovascular básica y clínica de España. Durante más de 18 años también ha sido jefe del servicio de Cardiología del Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid. 

Su investigación se centra en la protección y regeneración del miocardio dañado. Ha recibido varios premios y ha publicado más de 700 artículos en revistas científicas, resúmenes y capítulos de libros, con un factor de impacto total de 1.703,02, un índice de citas acumulativo de 13.727 y un índice H de 42. Participa activamente en diversos organismos públicos y privados nacionales e internacionales como experto en la planificación y evaluación de la actividad asistencial, docente e investigadora. Es miembro del American College of Cardiology, la American Heart Association y la European Society of Cardiology y pertenece al Comité Editorial de las principales revistas cardiovasculares internacionales.

¿Cuál considera que ha sido el logro más significativo de su carrera y qué impacto ha tenido en el campo de la cardiología?

Quizás no sea yo el más apropiado para contestar a esta pregunta. En cualquier caso, creo que el único logro relevante que se me puede atribuir es haber conseguido acompañarme bien, lo que a su vez ha derivado de una mentalidad real de servicio a la ciudadanía, intentando aportar algo para preservar su salud.

Cuando se quiere verdaderamente resolver los problemas surge la necesidad de trabajar en equipo con los mejores. Si lo consigues, todo lo demás viene rodado. Véase Medline o Pubmed para detalles.

Con el desarrollo tecnológico actual en diagnóstico y terapia, ¿Qué papel juegan las nuevas técnicas de imagen médica, soportadas por AI, y las nuevas terapias regenerativas para el corazón? ¿Hay algún otro avance significativo que nos quiera mencionar?

La verdad es que en las últimas dos décadas el desarrollo de las técnicas de imagen en cardiología han sido espectaculares y ha consolidado el uso aislado y combinado de las diferentes modalidades de imagen cardíaca (ecocardiografía, tomografía computarizada, resonancia y angiografía invasiva) como esencial en la práctica cotidiana, no solo para el diagnóstico de precisión de esta patología, sino también, y muy importante, para la toma de decisiones y para la planificación de las intervenciones quirúrgicas o con catéter.

La incorporación de la inteligencia artificial (IA) supone sin duda una nueva revolución en este campo, por varios motivos. En primer lugar, la IA ayuda a detectar patrones y anomalías con una precisión y rapidez que superan a las técnicas tradicionales. También permite el análisis cruzado en segundos de grandes volúmenes de datos de diferente índole (demográficos, socioeconómicos, genéticos, de patologías asociadas, etc), facilitando diagnósticos tempranos de alta precisión y decisiones más apropiadas a cada perfil de riesgo; ayudando a los médicos a identificar enfermedades cardiovasculares en etapas tempranas.

Por ejemplo, técnicas como la tomografía por coherencia óptica (OCT), la caracterización histológica y de perfusión de miocardio con resonancia o la evaluación de diferentes estructuras cardiovasculares con TAC, son utilizadas en diagnosticar con precisión la presencia y la gravedad de las patologías, para tomar decisiones tan trascendentes como implantar un desfibrilador, o planificar intervenciones complejas como el implante con catéter de válvulas artificiales. Además, con la ayuda de algoritmos de aprendizaje profundo, la IA puede detectar pequeñas variaciones en las imágenes que pueden pasar desapercibidas para el ojo humano, lo que aumenta la precisión del diagnóstico y permite un tratamiento más temprano y específico.

Las terapias regenerativas, como la terapia con células madre, o con fragmentos celulares (vesículas) o moléculas capaces de activar la capacidad regenerativa del corazón, están abriendo nuevas posibilidades para el tratamiento de enfermedades cardíacas, especialmente en casos de daño irreversible del tejido cardíaco, como ocurre, por ejemplo, después de un infarto.

Lo que hemos aprendido tras varias décadas de investigación es que se necesita profundizar en los mecanismos biológicos de la regeneración cardiaca antes de plantearse el uso rutinario en humanos de estas terapias. Para ello hay que potenciar la investigación básica y los estudios traslacionales mediante modelos experimentales e “in silico”.

En concreto, con apoyo de la IA y a través de los modelos computacionales, las investigaciones "in silico" en regeneración cardíaca serán herramientas fundamentales para simular, analizar y predecir los efectos de diferentes intervenciones terapéuticas regenerativas en el corazón. Su trascendencia es enorme, porque, así, este tipo de estudios reducirán la necesidad de experimentación en animales y humanos en etapas tempranas, permitiendo evaluar rápidamente los resultados de las terapias regenerativas. Permitirán, además, optimizar los parámetros de tratamiento y predecir la respuesta tisular en un entorno controlado, acelerando así el desarrollo de intervenciones seguras y eficaces.

Las terapias más prometedoras en ese sentido son las basadas en células madre pluripotentes, las células alogénicas, las vesículas celulares, y la ingeniería de tejidos. También están surgiendo nuevas técnicas de bioimpresión 3D para crear estructuras similares al tejido cardíaco, lo que podría, en el futuro, permitir la creación de parches cardíacos personalizados o incluso de corazones artificiales a partir de células del propio paciente. Finalmente, la terapia génica para modificar genes específicos asociados con enfermedades cardíacas hereditarias y la edición genética mediante CRISPR son áreas de investigación que podrían cambiar el panorama de la prevención y tratamiento de enfermedades cardíacas en el futuro. En el mundo de la cardiología los avances derivados de la modernización tecnológica, fundamentalmente en el campo de la imagen y de los biomateriales, han sido muchos y muy trascendentes. 

Cabe destacar entre otros: el avance descomunal de la técnicas mínimamente invasivas de intervención mecánica o eléctrica, como el implante con catéter de válvulas cardiacas o la ablación de focos arritmogénicos; el desarrollo de dispositivos médicos avanzados como marcapasos inteligentes y desfibriladores automáticos implantables (DAI), que se pueden conectar a sistemas en la nube y vigilar remotamente; las mejoras en telemedicina, que permite la monitorización remota de los pacientes; o el uso de dispositivos portátiles, como lo relojes inteligentes, para controlar en tiempo real la frecuencia cardíaca, el ritmo y otros parámetros. 

Finalmente, los avances en secuenciación genética e interpretación clínica de las mutaciones del ADN, alejados antes de nuestra especialidad, se han incorporado de lleno al abordaje de las cardiopatías y han llegado a hacerse imprescindibles en la toma de decisiones en muchos casos.

Una de las spin-off más exitosas en España en la actualidad es Corify, empresa de la cual usted es cofundador y que tiene un papel muy relevante en la medicina personalizada para el tratamiento de enfermedades cardíacas. ¿En qué medida cree que su implementación mejorará los resultados en salud para los pacientes?

Creo que Corify es una de las iniciativas más innovadoras en el ámbito de la medicina anticipativa y de precisión en cardiología, y que su tecnología tiene el potencial de transformar significativamente los resultados de salud en pacientes con enfermedades cardíacas, concretamente en arritmias tan prevalentes y malignas como la fibrilación auricular o las arritmias ventriculares. Es un ejemplo paradigmático de medicina personalizada, ya que ha desarrollado un sistema capaz de adaptar los tratamientos a las características específicas de cada paciente, identificando a aquellos que pueden responder a las técnicas de ablación, y consecuentemente mejorando la eficacia de las intervenciones y reduciendo el riesgo de efectos secundarios. 

Efectivamente, la tecnología desarrollada por Corify, incluye sistemas avanzados de mapeo y análisis de señales eléctricas cardíacas, que se aplican de forma no invasiva y sencilla, y permiten obtener una visión mucho más precisa y detallada del estado del músculo cardiaco de cada paciente. Identificando mediante Corify zonas musculares arritmogénicas con determinadas características se puede dilucidar con precisión la probabilidad de éxito que tienen ciertos tratamientos, como la ablación o la terapia farmacológica específica.

La implementación de esta tecnología en el entorno clínico tiene el potencial de mejorar significativamente los resultados en salud para los pacientes. Al identificar de forma más precisa el substrato de las arritmias en cada caso concreto, se personalizan las intervenciones; y en consecuencia, es posible reducir la tasa de recurrencia de arritmias y otros eventos cardíacos, mejorar la calidad de vida de los pacientes y reducir el número de ingresos hospitalarios. Además, al optimizar el uso de recursos en salud, Corify contribuye a un sistema de atención más eficiente, minimizando los costes asociados a tratamientos innecesarios.

En el futuro, la adopción de tecnologías como la de Corify podría establecer un nuevo estándar en el tratamiento personalizado de enfermedades cardíacas, tanto en España como a nivel global. Esto representa una oportunidad única para avanzar hacia una cardiología más precisa y eficaz, con un impacto positivo tanto en la salud de los pacientes como en la sostenibilidad del sistema sanitario.

Desde su punto de vista, ¿cuál es la importancia de la transferencia de tecnología y la colaboración con la industria para llevar los avances científicos a la práctica clínica?. ¿Qué papel cree que juegan empresas de consultoría biomédica, como GENESIS Biomed, en esta transferencia?

No es original afirmar que la transferencia de tecnología y la colaboración con la industria son esenciales para llevar los avances científicos a la práctica clínica, ya que permiten que las investigaciones se conviertan en soluciones concretas con beneficio directo. Estos procesos facilitan la innovación y aceleran la implementación de nuevos tratamientos, diagnósticos y tecnologías médicas, haciendo que el trabajo científico tenga un impacto real en la sociedad.

Las empresas de consultoría biomédica, como GENESIS Biomed, son fundamentales en este ecosistema, al ofrecer un puente entre investigadores y la industria, facilitando el desarrollo de estrategias de negocio, la búsqueda de financiación y el cumplimiento de normativas regulatorias. Además, ayudan a identificar oportunidades de mercado y diseñan planes para la comercialización de nuevas tecnologías, maximizando así las probabilidades de éxito y haciendo que los avances lleguen más rápidamente al paciente.

Para nosotros el papel de GENESIS Biomed ha sido clave por su acompañamiento en la transferencia de la tecnología de Corify desde el laboratorio hasta el mercado. Más allá de la enorme importancia de su asesoría, hemos recibido su ayuda en la orientación sobre el camino que deben seguir los desarrollos científicos para transformarse en soluciones aplicables a la práctica clínica, valorando previamente su viabilidad. 

Ha sido crucial su ayuda en la gestión financiera, guiándonos eficazmente en la obtención de capital a través de subvenciones, rondas de inversión o acuerdos con grandes empresas farmacéuticas y de dispositivos médicos. Su papel en el proceso regulatorio también ha sido clave, garantizando el cumplimiento de nuestra tecnología con los estándares y normativas necesarios para su aprobación en distintos mercados. Esto es crucial en el sector de la salud, donde el cumplimiento regulatorio es complejo pero imprescindible para garantizar la seguridad y eficacia de los nuevos tratamientos y tecnologías.

Creemos sinceramente que GENESIS Biomed cumple sin reservas el papel de facilitar y agilizar el proceso de transferencia de tecnología.