¿Por qué el 2024 será un año clave para la biotecnología?
Debido al potencial científico-tecnológico de España, tanto en el sector público como en el privado, nuestro país tiene la responsabilidad de dar un nuevo impulso al sector biotecnológico, y responder así a las demandas de Europa.
La autonomía estratégica de Europa se ha convertido en una de las prioridades para Bruselas. En este sentido, la Comisión Europea cerraba el 2023 señalando un grupo de áreas calificadas como trascendentales formado por tecnologías profundas para la consecución de este objetivo, entre las que se encuentra la biotecnología. Además, el sector biotecnológico ha sido destacado por la Comisión en su agenda de trabajo para este 2024 dado su “alto potencial de crecimiento y productividad laboral”.
Debido al potencial científico-tecnológico de España, tanto en el sector público como en el privado, nuestro país tiene la responsabilidad de dar un nuevo impulso al sector biotecnológico. Ante esta necesidad desde AseBio hemos puesto en marcha la campaña “Vida a la biotecnología” para hacer un llamamiento a realizar un esfuerzo de país, que impulse y renueve el compromiso de España con el sector biotecnológico. Con el apoyo político y social, y un ecosistema incentivador óptimo, la biotecnología puede liderar áreas de vanguardia, y desempeñar un papel clave para la economía, el bienestar social y la autonomía estratégica de España y de Europa.
En esta línea solicitamos al Gobierno la creación de un Alto Comisionado para Tecnologías Estratégicas Profundas como palanca de impulso del legado de la Presidencia española del Consejo de la UE, de la Ley de Start-ups, como instrumento para posicionar la tecnología en nuestro país e impulsar la Autonomía Estratégica de Europa, acompañar los esfuerzos de la Comisión Europea y mantener el referido impulso que han favorecido los fondos Next-Gen.
Se trata de un instrumento que obedece a necesidades específicas como las planteadas a lo largo de estas líneas, y sirve para trabajar de manera estratégica y colaborativa en torno a desafíos concretos. Además, posibilitará la creación de un marco general de gobernanza en torno a un problema específico e impulsar la sensibilización social y política sobre el mismo.
Este es sólo el primer paso y contar con el apoyo de todos es vital para aunar voces y fuerzas. Por ello, sumarse a “Vida a la biotecnología” es fundamental para, entre todos, conseguir que el sector biotecnológico despliegue todo su potencial y responder así a las demandas de Bruselas.